viernes, 30 de enero de 2009

Disneylandia

Hijo de inmigrantes rusos casado en Argentina con una pintora judía,
se casa por segunda vez con una princesa africana en Méjico.
Música hindú contrabandeada por gitanos polacos
se vuelve un éxito en el interior de Bolivia.

Cebras africanas y canguros australianos en el zoológico de Londres.
Momias egipcias y artefactos incas en el Museo de Nueva York.
Linternas japonesas y chicles americanos en los bazares coreanos de San Pablo.
Imágenes de un volcán en Filipinas salen en la red de televisión de Mozambique.

Armenios naturalizados en Chile buscan a sus familiares en Etiopía.
Casas prefabricadas canadienses hechas con madera colombiana.
Multinacionales japonesas instalan empresas en Hong-Kong y
producen con materia prima brasilera para competir en el mercado americano.
Literatura griega adaptada para niños chinos de la Comunidad Europea.
Relojes suizos falsificados en Paraguay vendidos por camellos
en el barrio mejicano de Los Ángeles.
Turista francesa fotografiada semidesnuda
con su novio árabe en el barrio de Chueca.

Pilas americanas alimentan electrodomésticos ingleses en Nueva Guinea.
Gasolina árabe alimenta automóviles americanos en África del Sur.
Pizza italiana alimenta italianos en Italia.
Niños iraquíes huídos de la guerra no obtienen visa
en el consulado americano de Egipto para entrar en Disneylandia.

Arnaldo Antunez
12 segundos de oscuridad. Jorge Drexler

¿Cuál es el precio que hay que pagar por "entrar"?
¿Qué estoy dejando en el camino?
¿Existe ese paraiso llamado Occidente?

1 comentario:

  1. Mercedes de los años 70, traídos de la URSS, con más de 500.000 kilómetros, conducidos por taxistas marroquíes...
    Niños de la calle que hablan indio, por las películas de Bollywood, en las aceras de Tetuán...
    Marroquíes casados con gitanas para obtener los papeles en Leganés, Madrid...
    La lista es interminable.Hay una cara amable en eso que llaman globalización, pero las consecuencias generales nos han conducido a este desastre mundial. De momento, en casa, vamos a por los 4 millones de parados.La clase media se derrumba, las familias se están ahogando, la sensación de abandono y manipulación por parte de las instituciones está más presente que nunca y mientras permanecemos dóciles y resignados a este teatro que nos ha tocado vivir. Total, de que serviría alzarse?
    "¡Al pueblo, pan y circo!"
    Un beso desde Marruecos

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